domingo, julio 27, 2014

La Fatalidad

Es bueno saber que a los Magos Negros les encanta fortificar la mente. Aseguran éstos que sólo por la mente se puede el hombre parecer a Dios. Los Magos de las tinieblas odian mortalmente la castidad.  

Se encuentran por millones los devotos de la Senda que abandonaron el Camino del Matrimonio Perfecto para hacerse discípulos de la Logia Negra. Sucede que a los devotos del ocultismo les atrae lo “raro”, lo novedoso y misterioso, y cuando encuentran a un Mago de estos “raros”, inmediatamente se entregan en sus manos como cualquier vulgar prostituta de la mente. Esa es la fatalidad.

Quien quiera nacer como Angel Cósmico, quien quiera de veras convertirse en un Angel con poderes sobre el fuego, el aire, las aguas y la tierra, quien quiera convertirse en un Dios, tiene de hecho que no dejarse atrapar de todas esas peligrosas tentaciones.

Es muy difícil hallar personas que sean tan firmes y constantes como para no abandonar jamás la Senda del Matrimonio Perfecto. El ser humano es demasiado débil. Esa es la fatalidad.

“Muchos son los llamados y pocos los escogidos”
. Con que logremos que unos pocos seres se eleven al estado angélico nos damos por satisfechos.

El amor, único camino de salvación. Los enemigos del Amor se llaman fornicarios. Estos confunden al Amor con el deseo. Todo Mago que enseñe la eyaculación del semen, es Mago Negro.

Toda persona que derrame el licor seminal, es fornicaria. Es imposible llegar a la Auto-Realización íntima, mientras no se mate el deseo animal. Aquellos que derraman el Vaso de Hermes son incapaces de amar. El Amor y el deseo son incompatibles. Quien derrama el Vaso de Hermes es víctima del deseo animal. El Amor es incompatible con el deseo y la fornicación.

El Matrimonio Perfecto
Samael Aun Weor

En este fragmento el maestro Samael  nos pone a reflexionar sobre la dificultad a la que todo estudiante gnostico se enfrenta para lograr un avance espiritual, y tristemente, afirma que son muy pocos los seres que logran el objetivo de estos estudios. Este fracaso se debe principalmente a la falta de seriedad, disciplina y constancia en el trabajo esoterico gnostico. Urgen superesfuerzos en las filas gnosticas, trabajemos en forma constante, objetiva y ordenada pues solo asi formaremos parte del grupo selecto de los escogidos.

domingo, julio 20, 2014

La Serpiente Voladora

Con lágrimas en los ojos, me arranco el corazón por tener que hablar cosas que no debería hablar por qué esto es como echarle margaritas a los cerdos, pero la pobre humanidad doliente las necesita y me veo en la angustia de decir algo sobre la Serpiente Voladora.

El pájaro serpiente. En el Popol Vuh de los mayas, el ave y la serpiente figuran como creadores sexuales del Universo.
Tepeu y Cocumatz envían un gavilán al inmenso mar de la gran vida para traer la serpiente, con cuya sangre maravillosa amasan el maíz amarillo y blanco. Dice el Popol Vuh, que con esa masa de maíz blanco y amarillo, mezclado con la sangre de la serpiente, el dios Tzacol formó la carne de la gente.

 El ave representa al Espíritu Universal de Vida. La serpiente representa al fuego sexual del Tercer Logos. La sangre de la serpiente indica las aguas del Génesis, el Gran Esperma Universal, el Ens Séminis o Semen Cristónico, en cuyas aguas está el germen de toda vida. Estas aguas son la sangre de la tierra, según el filósofo maya. La diosa Coatlicue es la Madre de la Vida y de la Muerte.
(el Ens Séminis).

Realmente, el fuego sexual del Tercer Logos hace fecundas las aguas de la vida para que surja el Universo.


En la teogonía maya, dos dioses intervienen en la creación: uno que da la vida y la forma al hombre, y otro que le da la Conciencia. El Tercer Logos hace fecundas las Aguas de la Vida y cuando éstas han sido fecundadas, interviene el Segundo Logos infundiendo Conciencia en todos los organismos. Los vehículos de acción de todas las fuerzas logóicas son los dioses inefables.

El Gavilán H´ Ch´ Uuy, el guacamayo “Mo”, el cernícalo X´ Cen Cen Bac, el tapir, Tzimink, Aax y la serpiente “Can” son los factores básicos de los mitos geogénicos mayas. Estos símbolos se utilizan exotéricamente y esotéricamente. En el campo exotérico o público simbolizan hechos de tribu, acontecimientos históricos, etc. En el aspecto esotérico o secreto, la cuestión es altamente científica, profundamente filosófica, sublimemente artística y tremendamente religiosa.

Entre los mayas, el Paraíso Terrenal es Tamoanchan, el sagrado lugar del Pájaro Serpiente. Tamoanchanes son de hecho los Iniciados de la Serpiente. El mito de los Tamoanchas es el del Párajo-Serpiente. Los Tamoanchas descienden de los toltecas, olmecas y mayas.

Los aztecas, después de muchas penalidades llegaron al lago Texcoco, símbolo del Semen Cristónico, donde encontraron el pájaro y la serpiente, el águila y la culebra. Cabe a los aztecas el alto honor de haber fundado la Gran Tenochtitlan sobre la base de la Sabiduría de la Serpiente.

La serpiente emplumada está hablando claramente del pájaro serpiente.
La serpiente emplumada fue identificada con Ketzalkoatl, el Cristo mexicano. Ketzalkoatl siempre está acompañado de los símbolos sagrados del águila y de la serpiente. La serpiente emplumada dice todo. El Águila del Espíritu y la Serpiente de Fuego nos convierten en dioses.

El Quetzal de los mayas es la serpiente emplumada, el pájaro serpiente.


El Matrimonio Perfecto
Samael Aun Weor

El objetivo de estos estudios es el despertar de la conciencia, la autorrealización íntima del ser. Sólo con la eliminación del ego y con la transmutación de nuestras energías creadoras a través del arcano AZF es como se logra nuestro objetivo, sin embargo es necesario practicar la meditacón profunda, la autoobservación y en general tener una disciplina esotérica.
Conforme vamos trabajando en nuestro crecimiento espiritual, va manifestandose el nacimiento de las virtudes y esto hace que a nuestro nivel experimentemos la felicidad. Todo trabajo tiene su recompensa.

viernes, julio 11, 2014

La Suprasexualidad


Suprasexualidad es el resultado de la transmutación sexual. Cristo, Budha, Dante, Zoroastro, Mahoma, Hermes, Ketzalkoatl y muchos otros grandes maestros fueron suprasexuales.

Los dos grandes aspectos de la sexualidad se denominan generación y regeneración. En el precedente capítulo ya estudiamos la generación consciente; ahora vamos a estudiar la regeneración.

Estudiando La vida de los animales hallamos cosas muy interesantes. Si a una serpiente la cortamos por la mitad podemos estar seguros que ella tiene poder de regenerarse. Esta puede desarrollar totalmente una nueva mitad con todos los órganos de la mitad perdida. La mayor parte de gusanos de tierra y mar tienen también el poder de regenerarse constantemente. La lagartija puede regenerar su cola, y el organismo humano su piel. El poder de regeneración es absolutamente sexual.
El hombre tiene el poder de recrearse a sí mismo. El hombre puede crear dentro de sí mismo al Superhombre. Esto es posible utilizando sabiamente el poder sexual. Podemos recrearnos como auténticos Superhombres. Esto sólo es posible con la transmutación sexual. La clave fundamental de la transmutación sexual es el Arcano A.Z.F., (la Magia Sexual).

En la unión del phalo y el útero se haya la clave de todo poder.
Lo importante es que la pareja aprenda a retirarse del acto sexual antes del espasmo, antes del derrame seminal. No se debe derramar el semen ni dentro del útero ni fuera de él, ni por los lados, ni en ninguna parte. Hablamos así claro para que la gente entienda, aún cuando algunos puritanos infrasexuales nos califiquen de pornográficos.

La vida humana por sí misma no tiene ninguna significación. Nacer, crecer, trabajar duramente para vivir, reproducirse como un animal y luego morir, esa es realmente una cadena de martirios que lleva el hombre enredada en el Alma. Si esa es la vida no vale la pena vivir. Afortunadamente llevamos en nuestras glándulas sexuales la semilla, el grano. De esa semilla, del grano, puede nacer el Superhombre. 

El Adam Cristo. El Niño de Oro de la Alkimia Sexual. Por eso sí vale la pena vivir. El camino es la transmutación sexual. Esta es la ciencia de Urano. Este es el planeta que controla las gónadas o glándulas sexuales. Este es el planeta que gobierna la constelación de Acuario. Urano tiene un ciclo sexual de ochenta y cuatro años. Urano es el único planeta que dirige sus polos hacia el sol. Los dos polos de Urano corresponden a los dos aspectos masculino-femenino. Estas dos fases se alternan en dos períodos de cuarenta y dos años cada uno. 

El estímulo alternante de los dos polos de Urano gobierna toda la historia sexual de la evolución humana. Épocas en que las mujeres se desnudan para lucir sus cuerpos, alternan con épocas en que los hombres se engalanan. Épocas de preponderancia femenina, alternan con épocas de caballeros intrépidos. Esa es la historia de los siglos.

Cuando el ser humano llega a la edad madura es estimulado entonces por el ciclo antitético, opuesto al que gobernó durante nuestra infancia y juventud. Entonces realmente somos maduros. Nos sentimos sexualmente estimulados por el opuesto sexual. Realmente la edad madura es maravillosa para el trabajo de regeneración sexual. Los sentimientos sexuales son más ricos y maduros a los cuarenta que a los treinta años.

El Superhombre no es el resultado de la evolución. El Superhombre nace de la semilla. El Superhombre es el resultado de una tremenda revolución de la Conciencia. El Superhombre es el Hijo del Hombre mencionado por el Cristo. El Superhombre es el Adam Cristo.


El Matrimonio Perfecto
Samael Aun Weor



Aquel que trabaja en la eliminacion del ego y revolución de la conciencia, haciendo meditaciones profundas y transmutando su energía creadora tendra comprensión  y podra realizar  trabajos de regeneración sexual, salud para el cuerpo y la mente.
Sigamos trabajando por la gran obra del Padre.

lunes, julio 07, 2014

Sexualidad Normal

Entiéndese por personas de sexualidad normal aquellas que no tienen conflicto sexual de ninguna especie. La energía sexual se divide en tres tipos distintos. Primero: La energía que se halla relacionada con la reproducción de la raza y la salud del cuerpo físico en general. Segundo: La energía que se halla relacionada con las esferas del pensamiento sentimiento y voluntad. Tercero: La energía que se halla relacionada con el Espíritu Divino del hombre.

La energía sexual es realmente y sin duda alguna, la energía más sutil y poderosa que normalmente se produce y conduce a través del organismo humano. Todo lo que es el hombre, incluyendo las tres esferas del pensamiento, sentimiento y voluntad, no es sino el resultado exacto de las distintas modificaciones de la energía sexual.

Debido al aspecto tremendamente sutil y poderoso de la energía sexual resulta ciertamente difícil el control y almacenamiento de esta energía. Además, su presencia representa una fuente de inmenso poder, que si no se sabe manejar puede llegar a producir una verdadera catástrofe.

Existen en el organismo ciertos canales por donde normalmente debe circular esta poderosa energía. Cuando esta energía llega a infiltrarse en el delicado mecanismo de otras funciones, entonces el resultado violento es el fracaso. En este caso se dañan muchos centros delicadísimos del organismo humano, y el individuo se convierte de hecho en un infrasexual.

Toda actitud mental negativa puede conducir directa o indirectamente a estas catástrofes violentas y destructoras de la energía sexual. El odio al sexo, el odio al Arcano A.Z.F., el asco o repugnancia por el sexo, el desprecio al sexo, la subestimación del sexo, los celos pasionales, el miedo al sexo, el cinismo sexual, el sadismo sexual, la obscenidad, la pornografía, la brutalidad sexual, etc., etc., convierten al ser humano en infrasexual.

El sexo es la función creadora por la cual el ser humano es un verdadero dios. La sexualidad normal resulta de la plena armonía y concordancia de todas las demás funciones. La sexualidad normal nos confiere el poder de crear hijos sanos, o de crear en el mundo del arte, o de las ciencias. Toda actitud mental negativa hacia el sexo produce infiltraciones de esta poderosa energía en otras funciones, provocando pavorosas catástrofes cuyo fatal resultado es la infrasexualidad.

Toda actitud negativa de la mente forza a la energía sexual y la obliga a circular por canales y sistemas aptos para las energías mentales, volitivas, o cualquier otro tipo de energías menos poderosas que la energía sexual. El resultado es fatal porque esa clase de canales y sistemas, no pudiendo resistir el tremendo voltaje de la energía poderosísima del sexo, se calientan y funden como un cable demasiado delgado y fino cuando pasa por él una corriente eléctrica de alta tensión.

Cuando el hombre y la mujer se unen sexualmente en Matrimonio Perfecto son, en esos instantes de voluptuosidad, verdaderos dioses inefables. El hombre y la mujer sexualmente unidos, forman un Andrógino Divino Perfecto. Un Elohim macho-hembra. Una divinidad terriblemente divina. Las dos mitades separadas desde el amanecer de la vida, se unen por un instante para crear. Eso es inefable... sublime... eso es cosa de paraíso.

La energía sexual es peligrosamente volátil y potencialmente explosiva. Durante el acto secreto, durante el éxtasis sexual, la pareja está rodeada de esta tremenda energía terriblemente divina. En estos instantes de dicha suprema y de besos ardientes que incendian las profundidades del Alma, podemos retener esa luz maravillosa para purificarnos y transformarnos absolutamente. Cuando se derrama el Vaso de Hermes, cuando viene el derrame, la luz de los dioses se retira dejando abiertas las puertas para que entre en el hogar la luz roja y sanguinolienta de Lucifer.
Entonces el encanto desaparece y viene la desilusión y el desencanto. Después de poco tiempo el hombre y la mujer inician el camino del adulterio, porque su hogar se ha convertido en un infierno.

Es una característica de la naturaleza el movilizar enormes reservas de energía creadora para crear cualquier cosmos. Empero sólo emplea de sus enormes reservas una cantidad infinitesimal para realizar sus creaciones. Así, pues, el hombre pierde en una eyaculación seminal seis o siete millones de espermatozoos; sin embargo, se necesita un infinitesimal espermatozoo para engendrar un hijo.

En la Lemuria ningún ser humano eyaculaba el semen. Entonces las parejas se unían sexualmente en los templos para crear.
En esos instantes las jerarquías lunares sabían utilizar un espermatozoo y un huevo para crear sin necesidad de llegar hasta el orgasmo y la eyaculación seminal. Nadie derramaba el semen. El acto sexual era un sacramento que sólo se verificaba en el templo.

La mujer en aquella época paría sus hijos sin dolor y la serpiente se levantaba victoriosa por el canal medular. En aquella época el hombre no había salido del Edem; la naturaleza entera le obedecía, y no conocía el dolor ni el pecado. Fueron los tenebrosos luciferes quienes le enseñaron al hombre a derramar el semen. El pecado original de nuestros primeros padres fue el crimen de derramar el semen. Eso es fornicación. Cuando el hombre paradisíaco fornicó penetró entonces en el reino de los luciferes. El hombre actual es luciférico.

Es absurdo derramar seis o siete millones de espermatozoos cuando sólo se necesita uno para crear. Un solo espermatozoo se escapa fácilmente de las glándulas sexuales sin necesidad de derramar el semen. Cuando el hombre regresa al punto de partida, cuando restablezca el sistema sexual del Edem, la serpiente sagrada del Kundalini se levantará otra vez victoriosa para convertirnos en dioses. El sistema sexual del Edem es sexualidad normal. El sistema sexual del hombre luciférico es absolutamente anormal.

No sólo se fornica físicamente; existe también fornicación en los mundos mental y astral. Aquellos que se ocupan en conversaciones de tipo lujurioso; aquellos que leen revistas pornográficas; aquellos que asisten a salones de cine donde exhiben películas eróticas pasionales, gastan enormes reservas de energía sexual. Esas pobres gentes utilizan el material más fino y delicado del sexo, gastándolo miserablemente en la satisfacción de sus brutales pasiones mentales.

El Matrimonio Perfecto
Samael Aun Weor

Sin duda reflexionemos sobre el uso que le damos actualmente a nuestra energía creadora, esta energía puede ser utilizada para curar o para enfermar, para crear o para destruir, o lo mas triste puede ser que desperdiciemos miserablemente nuestra valiosa energía creadora inutilmente, debido a la ignorancia o por una mala relación con la Divinidad.